Seguramente no os hablaría de las farmacias si ayer no hubiera tenido que acudir a ella por un dolor de oído.
Llevaba desde que llegué aquí (unas semanas) con un dolor horrible en el oído derecho, y pensé en acudir al medico puesto que no se me pasaba, antes de nada decidí hablar con una chica que conocimos al llegar para que nos recomendara el mejor hospital para acudir; mi sorpresa fue cuando me dijo que cuando se trataba de cosas "no urgentes" tenías que acudir a la farmacia donde suele haber un médico y este mismo te receta algo.
Un poco confusa, al día siguiente, fui a la farmacia de al lado de mi casa y le explique lo que me pasaba, no podía creérmelo cuando me mandó con otra chica que se supone que era la doctora y me empezó a mirar el oído delante de todo el mundo.
Sus palabras fueron : "have an infection", pero nisiquiera me miro con ningún instrumento médico, me dio un antibiotico y ya está, a casa.
Pasado un día sigo con mi dolor de oído aunque si que es verdad que me duele un poco menos.
La verdad que me ha sorprendido bastante, sobre todo porque me recetó un antibiótico, cosa que en España si no vas con una receta de un hospital o centro de salud es imposible que te lo den, pero a la vez también me pareció bastante práctico porque sino me hubiese tocado pasar toda la mañana esperando en el hospital y no podría haber ido a clase.
Besosss Mañana más ;)
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